La investigación sobre la percepción y el cerebro ha "medido": 15 milímetros de conciencia se enfrentan a 11 kilómetros (11 millones de mm) de subconsciencia.
(Vera Birkenbihl también lo ha ilustrado maravillosamente).
Una gran parte del subconsciente tiene lugar en el cuerpo. Alrededor del 60% de las fibras del sistema nervioso parasimpático son sensoriales y transmiten información desde las vísceras hasta nuestro tronco cerebral. Por lo tanto, tiene sentido trabajar con todo el cuerpo en los entrenamientos y coachings, porque la forma más rápida de utilizar los 11 km de subconsciente es el movimiento.
El concepto "Anatomía del liderazgo" tiene en cuenta estos conocimientos. La neuroplasticidad, la percepción sensoriomotora, la teoría polivagal, el trabajo corporal y otros temas se incorporan al concepto.
El enfoque de la formación y el coaching transmite la conexión entre el cuerpo y la mente y, basándose en la biología humana, promueve la construcción de conocimientos y la apertura al cambio a través de la experiencia activa. Descubrimos los recursos propios del cuerpo que van más allá de la mente y anclan el conocimiento teórico a través de la experiencia física. Creamos una nueva mentalidad corporal (Body-Mindset) y, de este modo, hacemos posible una cultura de trabajo sana, resiliente, integradora y cooperativa o, simplemente, un desarrollo holístico de la personalidad.
Al tomar conciencia de estas áreas, nos damos cuenta, por ejemplo, de que nuestro sistema nervioso reacciona de forma bastante automática a nuestro entorno, ya sea en la vida privada o en los negocios. Esa es nuestra biología. Así es como funciona el ser humano.
El mundo exterior afecta a nuestra fisiología y ésta determina nuestra mentalidad y nuestras acciones. Por lo tanto, nuestra actitud, nuestra forma de trabajar, nuestras cualidades de liderazgo y nuestra manera de tratarnos a nosotros mismos y a los demás también están fuertemente determinadas biológicamente.
Las creencias, los comportamientos y las experiencias están ancladas y almacenadas en nuestro cuerpo.
La forma en que nos enfrentamos al cambio también se "debe" al cuerpo, ya que el miedo ha sido un importante mecanismo de protección para nosotros durante más de 300 millones de años. Por lo tanto, nuestros mecanismos de lucha/huida/miedo, que garantizan nuestra supervivencia, deben tenerse en cuenta en el desarrollo personal, la resolución de problemas y también en el mundo empresarial. Por ejemplo, cuando luchamos fuertemente contra el cambio, nuestra necesidad biológica de seguridad juega un papel importante en ello, es decir, la forma en que nuestro cuerpo responde a los estímulos con una reacción de supervivencia. En una época de rápidos cambios, estos conocimientos son más valiosos que nunca.
Con la ayuda de los conocimientos de la neurociencia y la psicoterapia corporal, trabajamos con el sistema nervioso y el movimiento en "Anatomía del liderazgo".
Las áreas de tensión y las conexiones se hacen visibles y tangibles de una manera lúdica y obtenemos conocimientos para las posibilidades individuales de acción, entrenamos el sistema nervioso para la "seguridad" y disolvemos la resistencia.
Este enfoque ascendente desde el cuerpo hasta la mente permite un desarrollo personal y de la personalidad contemporáneo y sostenible.
Sólo cuando involucramos el cuerpo, también se hace el "clic" en la cabeza!
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